UN LLAMADO A LA SANTIDAD Y A LA PUREZA ESPIRITUAL

Versículo del día

“Cuando he aquí, una mujer le sale al encuentro, Con atavío de ramera y astuta de corazón.”

Proverbios 7:10 RVR1960

En este capítulo de Proverbios se nos advierte sobre los peligros de la seducción y la inmoralidad. No solo se expone el adulterio en las relaciones humanas, sino también el adulterio espiritual contra Dios, que se manifiesta cuando colocamos otros ídolos, como el placer momentáneo, por encima de nuestra devoción a Él. A menudo, en el ámbito espiritual, estamos expuestos a comportamientos similares a los de la mujer descrita en este Proverbio. Aunque actúa religiosamente, cumpliendo con sus ofrendas y votos, su corazón es hipócrita y hace lo malo ante los ojos de Dios. Su comportamiento exterior puede parecer el de una creyente, pero su vida interna está marcada por la desobediencia y la falta de sinceridad.
Hoy en día, la inmoralidad sexual está desbordada, incluso dentro de la comunidad cristiana, donde la cultura puede influir en nuestras decisiones y alejarnos de los principios bíblicos. Para evitar caer en esta tentación, es fundamental conocer la Palabra de Dios. Estudiar y meditar la Biblia fortalece nuestra fe y discernimiento. Es por esto que Proverbios 7:1-3 RVR1960 nos exhorta a guardar los mandamientos de Dios en nuestro corazón. También es esencial mantener una vida de oración activa, pidiendo la guía y protección de Dios frente a las tentaciones. Debemos buscar la compañía de otros creyentes que puedan apoyarnos y con quienes podamos ser transparentes sobre nuestras luchas, además de evitar situaciones de riesgo, reconociendo las circunstancias que nos pueden llevar a la tentación y alejándonos de ellas. Al fortalecer nuestra relación con Dios, desarrollamos un deseo más profundo de vivir en santidad.
En 1 Corintios 6:18-20 RVR1960 se nos recuerda:

“Huyan de la inmoralidad sexual. Cualquier otro pecado que un hombre comete está fuera de su cuerpo, pero el que peca sexualmente peca contra su propio cuerpo. ¿No saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y a quien han recibido de Dios?”

Al mantenernos firmes en nuestra fe y buscar vivir en santidad, honramos nuestra relación con Dios y nos preparamos para su regreso. La advertencia de este Proverbio sigue siendo relevante hoy. La inmoralidad sexual y el adulterio espiritual son amenazas que debemos enfrentar con seriedad, Manteniendo nuestros corazones y mentes enfocados en Cristo, buscando siempre con nuestra acciones glorificarlo a Él en nuestras vidas.

Oremos:

Amado Dios, para ti sea toda la gloria y honra. Señor te agradecemos por tu Palabra que nos guía y nos advierte sobre los peligros de la seducción y la inmoralidad. Te pedimos que nos ayudes a mantener nuestros corazones y mentes enfocados en Ti, alejándonos de todo lo que pueda alejarnos de tu voluntad. Fortalece nuestra fe y discernimiento a través del estudio y la meditación en tu palabra, para así tener la sabiduría para reconocer las tentaciones que nos rodean y la valentía para huir de ellas. Señor ayúdanos a vivir en santidad, que nuestra vida refleje tu gloria y que cada acción que tomemos honre nuestra relación contigo.
Te pedimos, Señor, que nos prepares para tu regreso, teniendo nuestras vestiduras blancas y resplandecientes, buscando siempre agradarte en todo lo que hacemos. En el nombre de Jesús, amén.

Autora: Emely Leyva

Servidora Iglesia Puerta del Cielo