LAS RIQUEZAS DEL SEÑOR
Versículo del día
“que en grande prueba de tribulación, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.”
2 Corintios 8:2, 9 RVR1960
En esta hermosa palabra vemos el amor amplio del Señor y las cosas intangibles como el amor, la bondad, la oración que no vemos pero todas tienen un efecto maravilloso y se siente de manera que tampoco podemos describir en su resultado.
En muchas ocasiones tenemos pruebas, tribulaciones, angustias, y es natural por nuestra naturaleza humana, pero hemos sido llenos con algo maravilloso, espiritual e intangible: las riquezas del Señor, los tesoros invaluables del GRAN YO SOY, la generosidad de JEHOVÁ SHALOM, por que hemos sido bendecidos con su gracia y somos ricos en dones, talentos, que vamos llevando a donde quiera que vayamos.
El Señor nos introdujo en su gracia que por su infinito amor se hizo pobre para que tuviéramos las riquezas que hoy podemos disfrutar, aquellas intangibles pero con valor incalculable, pues recordemos el pasaje bíblico donde Pedro y Juan sanan a un paralítico que les pedía limosna, pero Pedro le contestó:
“No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda.” Hechos 3:6 RVR1960
No necesito dinero para su sanacion, necesito una oración en el nombre de Jesús para ser libre y esto es algo que tiene mucho valor, de una oracion intangible se obtuvo algo tangible. Esto es el amor y poder de Dios, pues no queremos oro ni plata sino la presencia de nuestro Señor Jesucristo viva en nosotros cada día.
En Él somos verdaderamente ricos. Aleluya
Reflexionemos…
¿Queremos ser ricos en dinero o en el don de Dios?
Oración:
Señor gracias por hacernos parte de tu reino, por darnos estos tesoros incalculables y que son inmerecidos, pero en tu infinito amor nos has hecho parte de esto que hoy podemos gozarnos y alegrarnos por que tú estás con nosotros y dentro de nosotros, donde en tu nombre se hacen milagros y en ti hay vidas transformadas, por eso mil y mil gracias por dejarnos ser usados por ti y ser los instrumentos que llevan tus riquezas y podemos hacer ricos a muchos en tu santo nombre y conforme a tu santa y perfecta voluntad, ese amor inimaginable que lo sentimos pero lo vemos tangible cuando vemos el milagro cada día en nosotros y en otros . Amén y aleluya
Autora: Cristina Rodríguez
Servidora Iglesia Puerta del Cielo