LA LUZ DE CRISTO ILUMINA NUESTRAS VIDAS
Versículo del día
“¡Quién me volviese como en los meses pasados, Como en los días en que Dios me guardaba, Cuando hacía resplandecer sobre mi cabeza su lámpara, A cuya luz yo caminaba en la oscuridad;”
Job 29:2-3 RVR1960
Job en su desesperación por la enfermedad que tenía pensaba que Dios lo había abandonado y que ya no estaba más con él porque se sentía solo, abandonado, triste y no veía solución a su problema que era muy grande, en aquel momento es cuando como humanos pensamos que no hay solución, que una enfermedad llega y nuestra vida entra en desesperanza y angustia, ya no sabe uno como se va a sanar, si tiene cura o no, piensa que se va a morir y que, qué será de su familia, llega el sufrimiento y todo se acaba cuando eso pasa, la familia entra en angustia y nos olvidamos que Dios siempre tiene el control, aunque sabemos que es así, nuestra mente no razona porque nos falta fe, amor y confianza en que nuestro Padre que nos ama tanto está esperando que nuestro corazón sea fortalecido y pida su ayuda, que creamos que Él lo puede todo y que estamos en sus manos y en sus caminos, es Él quien nos está guiando y su mano poderosa nos levanta si caemos y nos sana si nos enfermamos, porque todo lo malo que llegue a nosotros es para que veamos si nuestra fe es firme o sólo caminamos por hacerlo, cuando vamos por un camino que no conocemos, especialmente en fincas, llegamos a sitios como ríos que tenemos que cruzar para llegar al otro lado y decimos ahora que hacemos, pero es necesario cruzar y buscamos la forma porque toca seguir avanzando y lo logramos, y nos sentimos bien, así son los caminos de la vida en Dios toca cruzar al otro lado y nos sentimos victoriosos porque es Dios quien nos ayuda siempre a cruzar, es Él quien nos da la fuerza y quita todo temor por eso Él nos prepara cada día para que cuando llegue la prueba estemos listos para enfrentarla sin miedo, pidamos cada día al Espíritu Santo la fortaleza, el amor y la sabiduría que estemos cimentados en la roca firme que es Jesucristo para no caer ni temblar de miedo porque la fuerza de Dios nos sostiene siempre y caminamos en la luz de nuestro Señor Jesucristo.
Oremos:
Padre nuestro hoy estamos aquí para entregarte nuestro corazón, nuestra mente, palabras y obras, queremos entregarnos en tus manos para que tu nos moldees de acuerdo a tu Santa y perfecta voluntad, te pedimos perdón por nuestros pecados, no permitas que sigamos fallando porque queremos estar preparados para tu venida, sabemos que tú nos invitas al arrepentimiento y a limpiar nuestras vestiduras para poder llegar a tu presencia sin mancha de pecado, ayúdanos para seguir siendo dignos de representar tu Santo Nombre porque tú nos llamaste hijos, te pedimos humildad, amor, sabiduría y entendimiento de tu palabra para que la guardemos en nuestros corazones como el tesoro más hermoso que hemos recibido de tu mano, bendicenos cada día, danos fortaleza para seguir caminando contigo sin cansancio hasta llegar a tu presencia porque es nuestra meta verdadera, la vida eterna, ese premio maravilloso que nos regalaste, te pedimos que transformes nuestros corazones y tengamos ese cambio en nuestras vidas, danos paz, gozo y un mismo sentir cada día, gracias por tu palabra por suplir nuestras necesidades, por el empleo, por la provisión por el amor y la dedicación hacia nosotros, gracias por el sacrificio en la cruz por nuestra salvación, por nuestra sanación del cuerpo y el espíritu, ayúdanos para que cada día nos esforcemos más por cumplir el propósito que tú has puesto en nosotros, nos entregamos en tus manos confiados en que tu presencia maravillosa está con nosotros y obras por nuestra causa, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén
Autora: Erika Diaz
Servidora Iglesia Puerta del Cielo