LA EXALTACIÓN DEL SEÑOR
Versículo del día
“Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo; echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.”
1 PEDRO 5:6-7 RVR1960
Algo que es muy difícil para el mundo es la humillación porque se siente pisoteados, menospreciados, desechados por que humanamente es el significado que se ha tenido para esta palabra, pero nosotros como hijos de Dios tenemos el verdadero concepto de humillación por qué no es ante el mundo sino ante Dios, no es pelear o maldecir al que nos humilla es ponerlo en oraciones para que sean bendecidos, es ver las cosas espirituales y no carnales, por eso nos gozamos en el Señor aún en las humillaciones porque cuando sea el tiempo correcto esto tendrá su recompensa y es la exaltación del Padre celestial ante el mundo, que mejor ganancia que está, por eso no debemos afanarnos por nada sino siempre llevar todas nuestras ansiedades, tristezas, dolor al Señor, para no tener pensamiento de mal sino de bien y hacer lo correcto y justo ante el Señor y no ante el mundo, por eso es que para él mundo somos locos pero locos por Cristo por poder agradarle y hacer su santa y perfecta voluntad, porque cuando descansamos, reposamos en Él, Él va a venir siempre a nuestro rescate y va a tomar el control de todas las situaciones de nuestra vida y en todas nos dará la victoria que será en Cristo Jesús, no para nuestros deleite o placeres o para consentirnos como hijos malcriados sino para que se cumpla su obra, su propósito en nosotros aún si para llegar a esto Él nos tiene que corregir con bara, porque lo que quiere es que realmente lleguemos a su presencia y nos quedemos allí para siempre.
Reflexionemos…
Nos sentimos humillados por el mundo o ante Dios?
Oración:
Señor sabemos que tú resistes a los soberbios y das gracia a los humildes, que nos humillamos es ante tu presencia y no ante el humano, que confiamos en ti y no en el prójimo, que descansamos en ti y no en las cosas materiales, que reposamos en ti y no en el mundo, porque de ti es que viene La Paz, la exaltación, la victoria y la salvación, solo queremos rendirnos ante tu presencia y esperar gozosamente tu gloriosa venida. Amén
Autora: Cristina Rodríguez
Servidora Iglesia Puerta del Cielo