DIOS EL 911 DE NUESTRA ALMA
Versículo del día
Salmos 70:1 RVR1960 Oh Dios, acude a librarme; Apresúrate, oh Dios, a socorrerme.
Este salmo es una oración de súplica donde el salmista nos plantea la manera correcta de clamar a nuestro Padre por liberación y protección. Este salmo es propicio cuando queremos buscar el rostro del Señor, para que Él nos libere y nos justifique, dándonos una visión clara de cómo debemos actuar en momentos de opresión de nuestros enemigos.
Así como David se encontraba en un estado de urgencia, muchos de nosotros también hemos transitado por circunstancias similares cuando no recibimos respuestas inmediatas, especialmente cuando esperamos una resolución divina. A pesar de esto, debemos imitar a David quien mantiene la calma y sigue esperando pacientemente en Jehová convencido que su socorro viene de Él, porque sin duda es el 911 de nuestra alma que nunca estará ocupado ni fuera de servicio.
Cuando otros nos desilusionan y amenazan, nos sentimos vacíos, es como si nos hubieran robado una parte vital de nuestro ser, sentimos el frío de la traición de la confianza depositada en el hombre y como resultado se quebranta nuestro espíritu, porque hemos sido creados para poner nuestra confianza solo en Dios, quien no es hombre para que mienta ni hijo de hombre para que se arrepienta. En los momentos secos, vacíos, debemos unirnos al salmista y suplicar a Dios que se apresure a ayudarnos, pues únicamente Él puede llenar nuestras vidas con su gozo y liberar nuestra alma de cualquier opresión porque junto a Él somos más que vencedores.
Oración:
Padre amado para ti sea toda la gloria y alabanza te damos las gracias Señor y te bendecimos porque solo tú te apresuras y nos socorres en los momentos en la cual nos sentimos sin salida. Gracias Señor porque siempre has sido nuestro refugio y nuestra fortaleza en cada momento de aflicción. Señor hoy te pedimos perdón cuando nos hemos sentido vacíos y quebrantados al confiar en cosas o personas humanas y no en Ti el único capaz de llenarnos y ser fiel de cumplir sus promesas. Señor queremos corresponder a tu amor y a tu fidelidad siendo esos hijos dignos de reflejar tu luz a través de la palabra de vida para que seas tú el libertador y el oportuno socorro de otro como ya lo eres en nuestra vida. En el nombre poderoso de Jesús amén.
Autora: Emely Leyva
Servidora Iglesia Puerta del Cielo