Versículo del día

“Ester no declaró cuál era su pueblo ni su parentela, porque Mardoqueo le había mandado que no lo declarase.”

Ester 2:10 RVR1960

Ester tenía gracia y aunque como hombres no vemos el corazón Dios si puede verlo, ella halló gracia para ser la esposa del rey y su corazón se ablandó y dio beneficios a todo el pueblo de Ester e hizo fiesta porque estaba alegre, Ester era juiciosa y criada con buenas bases de obediencia y temor a Dios, pues oraba por su pueblo y ayudaba a su gente, pues era bondadosa y agradó al rey todo lo que ella hacía.

Nosotros como hijos de Dios podemos pedirle que nos de un corazón blando, que quite todo lo que no es de Dios y ponga en nosotros el deseo de servir con amor como Él nos enseñó para que todo lo que hagamos nos lleve siempre a su presencia, pidamos al Espíritu Santo que nos de gracia para servir a Dios con cada acto que hagamos y que nuestro corazón sea siempre agradable a sus ojos, que nos de dominio propio para que pensemos antes de actuar y no hagamos nada desagradable ante los ojos de Dios.

Oración:

Padre Santo te damos gracias porque nos amas con amor infinito y tu misericordia es la fuerza que nos ayuda para no desmayar en esos caminos, danos humildad, sabiduría y amor, que seamos fortalecidos en la fe de creer que contigo lo tenemos y lo podemos todo, bendicenos Señor y llévanos a tu Santa presencia cada día y ayúdanos a alejarnos del mundo y de todo lo que no nos edifica, que caminemos siempre cimentados en la fe, que nuestro corazón que solo tú puedes ver sea blando y sensible a todo lo que tú esperas de nosotros tus hijos, que podamos cumplir el propósito para el que tú nos llamaste, danos humildad y fuerza para seguir que venzamos obstáculos con tu ayuda y venzamos todas las dificultades que se puedan presentar en nuestro camino cada día porque con tu ayuda todo es mas fácil Dios poderoso, gracias por amarnos cada día, guiarnos, protegernos y darnos toda clase de bendiciones para que solo nos preocupemos por cuidar nuestra salvación, nos entregamos en tus manos, en el poderoso nombre de nuestro Señor Jesucristo, Amén.

Autora: Erika Diaz

Servidora Iglesia Puerta del Cielo