Versículo del día

“Ya no hay judío ni griego ; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.”
Galatas 3:28 RVR1960

En este versículo, Pablo habla de nuestra unidad espiritual en Cristo. Esto implica también igualdad social.
Todos pertenecemos al cuerpo de Cristo, somos hijas e hijos de Dios. La salvación es ofrecida a todos, sin distinción de raza, clase social o sexo.
El señor, no hace distinción para Él, todos somos sus hijos amados, murió por todos y nos salvó a todos por igual. Por eso Él no quiere que tengamos una iglesia dividida o unos con más privilegios que otros.
Tanto hombre, como mujer, fuimos creados a imagen de Dios, teniendo relación directa con Él, convirtiéndonos en herederos de sus bendiciones, sin ninguna distinción, todos somos iguales ante sus ojos.
Cuándo las fuerzas del mundo, la maldad y el egoísmo humano traten de dividirnos, debemos recordar que sólo en Jesús podemos ser uno.

Oración:

Señor, danos una vida de redención, y unidad, enséñanos a amarnos y respetarnos unos a otros como tú lo has hecho, aceptarnos, tal como somos, sin juzgar, ni criticar a los demás, que entre nosotros no hayan divisiones, que seamos uno solo en Cristo Jesús, amén

Autora: Elsa Morales

Servidora Iglesia Puerta del Cielo