DIOS TE CONOCE MEJOR QUE NADIE

Versículo del día

“Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos;”

Salmos 139:23 RVR1960

Este salmo es un poema de alabanza a Dios que celebra Su conocimiento, presencia, poder y santidad. El salmista, David, expresa su asombro ante la omnipresencia de Dios, su profundo entendimiento del ser humano y la maravillosa obra de la creación. Además, se presenta como una poderosa invitación a examinar nuestra propia vida, permitiendo que Dios revele cualquier camino equivocado. Nos llama a la honestidad con nosotros mismos y a confiar en la guía divina para transitar por el sendero de la integridad y la vida eterna.Como seres humanos, a menudo somos demasiado duros con nosotros mismos. Podemos sentir la necesidad de mantener nuestros pensamientos y sentimientos en secreto, ya sea por vergüenza o por temor a ser juzgados por otros. Sin embargo, David nos recuerda que no hay nada en nuestros corazones o mentes que esté oculto para Dios. El salmista acepta su vulnerabilidad ante Él, lo que le permite acercarse más a Su presencia. Dios no necesita que intentemos ocultar algo en nuestras vidas, porque Él ya lo conoce todo. Al orar y pedir la ayuda de Dios para examinar nuestro corazón y mente, reconocemos que vivimos en una relación con Él, una relación que nos permite crecer y ser transformados. En un mundo caótico, donde a menudo parece que no tenemos control sobre nuestras vidas, es fundamental recordar que contamos con una conexión segura con un Dios amoroso y omnipresente que nos conoce íntimamente. Tomemos un momento cada día para reflexionar sobre nuestra vida y pedirle a Dios que nos examine profundamente, para que podamos conocernos mejor y así convertirnos en mejores personas. De esta manera, atraemos a otros con nuestros testimonios, invitándolos a conocer de manera genuina a Cristo, siendo esa luz y esa sal que tanto necesita el mundo hoy.

Oración:

Padre amado para ti sea toda la gloria honra y alabanza. Señor te doy las gracias por conocerme más que nadie. Por eso Señor te pido que examines mi corazón y conozca mis pensamientos. Ayúdame a ser consciente de mis acciones y a buscar siempre tu guía en cada paso que doy. Permíteme vivir en la verdad y en la luz de tu palabra y de tu amor, para que mis intenciones sean puras y agradables a Ti. En el nombre de Jesús amén.

Autora: Emely Leyva

Servidora Iglesia Puerta del Cielo