Versículo del día

“Después de esto abrió Job su boca, y maldijo su día. Y exclamó Job, y dijo: Perezca el día en que yo nací, Y la noche en que se dijo: Varón es concebido.”

Job 3:1-3 RVR1960

Job había atravesado por muchas dificultades, para este momento él ya había perdido a sus hijos, la muerte de su ganado, su mujer le dijo que maldijera a Dios y estaba atravesando por una enfermedad, todo esto lo llevo al punto de que el deseara no haber nacido, sin embargo, si continuamos leyendo podemos ver que a pesar de tocar fondo él no se alejó del Señor ni lo culpo de su situación, porque al final Job era de naturaleza pecaminosa pero tenía un corazón de fe, amor y dependencia de Dios.
Te invito a que el día de hoy te preguntes, ¿Qué tanto dependo de Dios?, porque es fácil que nosotros agradezcamos en los momentos buenos, en las bendiciones pero que sucede cuando se presentan dificultades, ¿Seguimos buscando, confiando y descansando en Dios, entregándole el control absolutamente de todo y teniendo fe para verlo obrar y rescatarnos?, aunque es cierto que somos humanos y tenemos emociones, no obstante debemos orar para que Dios nos de fortaleza y no permitir dejarnos controlar por esas emociones momentáneas, recuerda que todo lo que Dios permite que pase en tu vida tiene un propósito, Él te eligió porque te conoce y sabe que si te sostiene de su mano vas a poder salir en gozo y en victoria, no olvides que la recompensa es grande y que así como en tu vida se presentan momentos difíciles, si permaneces a su lado Dios te proveerá de paz, fortaleza, fe y lo mejor su compañía.
Dios tiene preparado cosas grandes para tu vida permanece fiel, Sin embargo, como está escrito:

“Antes bien, como está escrito: Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, Ni han subido en corazón de hombre, Son las que Dios ha preparado para los que le aman.”

1 Corintios 2:9 RVR1960

Oración:

Jehová Shalom, eres el Dios que está presente en todo momento de vida nunca me haz dejado solo y ni me haz abandonado en el momento de mi angustia,confío en lo que haces en vida y en cómo lo guías por qué solamente tú eres el dueño de ella, que en mi corazón no falte la fe, el amor y la fidelidad hacia señor te lo pido en el nombre de Jesús. Amén

Autora: Anahí Ponce

Servidora Iglesia Puerta del Cielo